Además de una idea atractiva para los niños, por la presentación, es…
una receta perfecta para esta época del año, ya que la calabaza se encuentra en su mejor momento y la bajada de la temperatura invita a “guisos de cuchara”.
La mezcla del sabor del puerro (más fuerte) con el dulzor de la calabaza acompaña de maravilla a la carne de cordero “Pascual”.
Ingredientes:
1 pierna de cordero pascual, deshuesada y partida en trocitos
3 puerros.
Calabaza, 750 gr/ 1 kg.
Caldo de carne, necesitaremos algo más de 1 L.
Tomillo
Preparación:
En esta ocasión el caldo lo he preparado, yo, poniendo en 2 L de agua fría, los huesos de la pierna de cordero, 1 hueso de Jamón, ½ cebolla, 1 zanahoria, 2 hojas de laurel unos granos de pimienta y un poco de sal (poca, recordad hemos puesto el hueso de jamón)
Cocer todos los ingredientes en una cacerola tapada por espacio de 1 hora. Colar.
Podéis hacer el caldo el día de antes o comenzar a cocinar, el guiso, una vez esté el caldo listo.
Empezamos con el guiso:
En una cazuela con un poco de aceite ponemos los puerros cortados en rotadas finas, rehogamos y añadimos los trozos de carne. Mezclamos bien, salpimentamos.
Cuando la carne comience a dorarse incorporamos un chorrito de vino y a fuego fuerte dejamos que se evapore.
Añadimos la calabaza cortada en cuadrados y un poco de tomillo volvemos a mezclar bien los ingredientes y pasados unos minutos incorporamos el caldo caliente.
Tapamos la cazuela y dejamos cocer 45 min. Tiempo suficiente para que la carne esté blanda.
Si queréis sorprender a vuestros hijos y que no se puedan resistir a probarlo, presentad el guiso dentro de la calabaza.
¡Yo lo he hecho!