Es frecuente que, con el final de las vacaciones de verano o con el comienzo del año Nuevo, nos propongamos nuevos logros (¡o viejos no conseguidos!): aprender un idioma, ir al gimnasio, perder peso… y nos olvidamos de incluir algunos que no aparecen en “el manual” del: profesional perfecto, la mujer perfecta, el hombre perfecto, los cuerpos perfectos, las vidas perfectas. Algo tan sencillo (o complicado) como intentar simplificar nuestra vida o pararnos a saborear los momentos de felicidad que nos ofrece el día a día o disfrutar de tiempo con nuestros amigos.
¡Quiero tiempo libre pero me niego a no cocinar!
Con este pensamiento he trabajado a lo largo de la semana y he preparado recetas sencillas, sin complicaciones, simplificando, pero siempre con nuestro “toque”, para que el resultado sea atractivo, sorprendente y no caigamos en la monotonía y el aburrimiento.
Lunes 3
Primer día de trabajo y sin posibilidad de empezar poco a poco. Así que para cenar nos hemos decidido (digo “nos” porque, en casa, cuando estamos cansados, si todos comemos todos pensamos) por un plato completo, sencillo, sabroso y si eres de l@s que cuentas las calorías muy adecuado.
Barquitas de calabacín con jamón y queso
1 calabacín pequeño (por persona), cebolla, jamón Ibérico y queso cremoso.
Calentamos el horno a 210ºC.
Lavamos los calabacines, los despuntamos, pelamos en tiras intercaladas y partimos longitudinalmente. Los ponemos en el horno unos 20 min
Mientras, picamos ½ cebolla muy fina y la pochamos con unas gotas de aceite. Cuando esté bien blandita añadimos el queso y mezclamos bien.
Sacamos los calabacines del horno y los colocamos en un plato ponemos encima el jamón Ibérico y por último el queso fundido.
Y… ¡ya está! Cena sabrosa y rápida.
Notas: He utilizado queso Camembert pero se puede utilizar otro queso cremoso o si nos preocupan las calorías, el colesterol… un queso bajo en materia grasa o 0%
También se puede servir sobre pan, que habremos tostado previamente, o añadir una rodajas de tomate… ¡dejemos volar la imaginación! ¿Qué cambiaríais?
Jueves 6
Según avanza la semana, se comenta la inminente vuelta al “cole” y la posibilidad de que nos niños lleven la comida al comedor escolar. Este es un tema que conozco muy bien, pues mi hijo, al ser celiaco, ha llevado su comida a diario durante toda su etapa escolar así que espero, en próximas semanas, ofreceros alguna idea.
Si os preocupa, os aconsejo una página, de profesionales de la salud y la nutrición: “http://www.alimentacionsaludable.es/” donde he encontrado: “guía para comer en el colegio comida de casa” además de otros artículos muy interesantes.
Hoy he preparado un plato perfecto para que, los niños y los no tan niños, coman verdura sin protestar y una solución para el menú del cole
Carne picada con espinacas (4 personas)
300 gr. de carne picada de ternera, 300 gr. de espinacas, 1 rebanada de pan, leche, 1 clara de huevo, 1 diente de ajo, perejil y nuez moscada.
Cocemos las espinacas 5 min. con un poco de agua con sal.
Mientras, empapamos la rebanada de pan con un poco de leche.
Pasamos por la batidora el pan, 1 diente de ajo y perejil picado.
Añadimos esta mezcla a la carne picada, incorporamos la clara de huevo, las espinacas (muy escurridas), nuez moscada y salpimentamos. Amasamos bien.
Hacemos albóndigas con la masa. Las aplastamos para que se cocinen mejor. Y las hacemos en una sartén bien caliente con un poco de aceite.
Servir con tomate frito.
Notas: en esta receta utilizo pan sin gluten por lo tanto en una solución APTA para CELIACOS.
La preparación se puede hacer por la noche y dejar en el frigorífico, bien tapada y por la mañana sólo freír.
Como siempre os deseo ¡Feliz Semana!